martes, 26 de abril de 2011

Maurice Ravel: Impresionismo, originalidad y modernismo


Cuatro de las obras fundamentales de quien fue considerado un de los genios de la orquestación entre finales del XIX y principios del XX, conforman el programa de conciertos de la Orquesta Sinfónica de Lara, para este Jueves a las 8:00 p.m.
(Prensa OSL)


Con la fuerte influencia de una de las épocas más importantes en la Historia de la Música Universal, en pleno corazón de la Francia Iluminada en la fecunda frontera de del siglo XIX y el XX, surge la figura de uno de los más importantes y trascendentales músicos, considerado genio de la orquestación y heredero del legado impresionista de Claude Debussy.

Maurice Ravel, nacido en marzo del 1875 en la localidad de Ciboure, asentamiento del vizcondado de Labort, en lo que fue llamado el País Vasco Francés y muere en París el 28 de diciembre de 1937, se destacó por su perfecta elaboración del trabajo de orquestación de sus obras, llegando a preservar en ellas un enorme contenido expresivo, con características que transcendieron en el pensamiento musical del momento.

En Ravel se logró la perfecta conjugación de la inteligencia en el arte de configurar la arquitectónica de las formas, la armonía y la melodía, haciendo surgir un caudaloso río de intensidades propias de la pasión con la que supo cultivar su arte, la cual, contó con la influencia no solamente de grandes músicos como Debussy, Satie, Chabrier, Saint-Saëns, si no de lo más selecto de la literatura francesa en las plumas de Poe, Baudelaire, Mallarmé, entre otros, quienes iluminaban de ideas la sociedad que llegó a constituirse en la Capital Mundial del Arte para los albores ya en indetenibles estallidos de genialidad artística que caracterizó ese momento histórico de la música.

Es así como este Jueves 28 de Abril a las 8:00 p.m. en el Gran Salón del Hotel Trinitarias Suites, la Orquesta Sinfónica de Lara, bajo la batuta de su Director Titular, el Maestro Tarcisio Barreto Ceballos estarán ofreciendo en su acostumbrado concierto de cada jueves, un programa de concierto dedicado totalmente a cuatro de las obras más representativas del compositor francés.

De esta manera, el programa de concierto se iniciará con la obra “Alborada del Gracioso” compuesta en 1905 como parte de un grupo de cinco obras para piano denominada “Espejos”. Cada una de estás cinco obras fue dedicada a los miembros de un grupo de eminentes artistas del cual forma parte Ravel, el cual se denominaba “Los apaches”. La cuarta, “La alborada del gracioso” que el la comedia española es la representación de “La Serenata Matinal del Bufón” en la cual un bufón ayudaba a diversos músicos a interpretar la alborada a una amante que aún dormía. La obra fue orquesta por Ravel en 1918.

“La Tumba de Couperin”, igualmente, escrita como una suite para piano, antes de los inicios de la Primera Guerra Mundial, significó la obra que Ravel dedica al dolor, al sufrimiento y a la pérdida de grandes amigos en el frente de batalla. Ravel, quien estaba exento de alistarse en el ejercito, resolvió hacerlo pues deseaba pelear por su país, experimentando así las más tristes experiencias entre ellas la muerte de su madre, la de sus amigos más cercanos y a la vez tener que afrontar graves problemas de salud, que le impidieron durante tres años poder terminar alguna obra. La suite se encuentra dividida en tres movimientos.

“La Valse” intento de Ravel por escribir para el ballet durante 1917, cosa que le resultó imposible dado los acontecimientos de la guerra. Originalmente había pensado la obra para homenajear a Johann Straus, recreando toda la pomposidad, elegancia y grandiosidad de la corte de Viena del siglo XIX. La trágica experiencia vivida en la guerra, le hicieron cambiar el pensamiento de la obra, la cual terminó siendo, según sus propias palabras “un torbellino fantástico y fatal”

Finalmente “El Bolero” es sin duda la obra con la cuala Ravel se hace del reconocimiento universal en su genialidad, originalidad y creación. Está dedicada a la bailarina rusa Ida Rubestein, amiga íntima de Ravel, quien sin duda fue su total inspiración para hacer de una danza española, la cúspide de la orquestación y el tratamiento perfecto del timbre en el conjunto sinfónico.

Durante el concierto, la Orquesta Sinfónica de Lara, brindará un sentido y especial homenaje al Maestro Héctor Gutiérrez Cortinas, fundador del Sistema de Orquestas y Coros del Estado Lara, quien arriba a sus 80 años de vida, la cual la ha dedicado completamente a la enseñanza de cientos de niños y niñas en la ejecución instrumental, en el canto, la practica orquestal y coral, en todos los Módulos Orquestales del Estado Lara, de los cuales fue director musical y docente, dejando un enorme legado de experiencias y aprendizajes, los cuales se encuentran plasmados en muchos de sus libros que hoy se encuentran publicados.

Alfredo Leal

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